Los bloggers vivimos en no se sabe qué mundo de ilusión.
Algo así viene a decir Michael Keren, autor del libro "Blogosfera: La nueva arena política". Según este señor, los bloggers, es decir todos aquellos que tenemos un blog somos seres aislados, retraídos, que no vivimos en la realidad y por eso nuestros posts destilan constantemente melancolía y no sé que suerte de paralelismo emocional con D. Quijote.
Esto me lleva a preguntarme si en realidad este señor se ha parado a leer lo que dice o simplemente en su retraimiento, aburrimiento y aislacionismo social ha necesitado escribir un libro atacando el perfil psicológico de los blogonautas para hacerse notar. De todos es sabido, puestos a psicoanalizar, que es un comportamiento típico de las personas retraídas adoptar actitudes desmedidas para llamar la atención. Escribir un libro, con todo lo simple que resulta (las librerías están llenas de ellos, debe de ser que no es una labor imposible) tampoco es una tarea tan inmediata que se haga en una tarde. De modo que imagino que habrá dedicado más de una tarde y más de dos a encerrarse y aislarse para escribir el susodicho libro.
Sin embargo, en el fondo de una áspera y desabrida crítica a la blogosfera se esconde una advertencia que no es baladí. La blogosfera puede ser un medio de comunicación, una forma de expresión, un lugar donde conocer gente pero no debe ser un sustituto del mundo físico donde hay otras luces que las del led de los altavoces o el de la webcam.
Esto me lleva a preguntarme si en realidad este señor se ha parado a leer lo que dice o simplemente en su retraimiento, aburrimiento y aislacionismo social ha necesitado escribir un libro atacando el perfil psicológico de los blogonautas para hacerse notar. De todos es sabido, puestos a psicoanalizar, que es un comportamiento típico de las personas retraídas adoptar actitudes desmedidas para llamar la atención. Escribir un libro, con todo lo simple que resulta (las librerías están llenas de ellos, debe de ser que no es una labor imposible) tampoco es una tarea tan inmediata que se haga en una tarde. De modo que imagino que habrá dedicado más de una tarde y más de dos a encerrarse y aislarse para escribir el susodicho libro.
Sin embargo, en el fondo de una áspera y desabrida crítica a la blogosfera se esconde una advertencia que no es baladí. La blogosfera puede ser un medio de comunicación, una forma de expresión, un lugar donde conocer gente pero no debe ser un sustituto del mundo físico donde hay otras luces que las del led de los altavoces o el de la webcam.
Más información, aquí.
3 comentarios:
Y como nadie se lo leía en su blog Michael Keren ha decidido pasarlo al papel. En fin, si en la blogsfera política se comenta la actualidad qué quiere? palmas y castañuelas?
Efectivamente, algo así fue lo primero que pensé yo al leer el artículo.
Me da a mi que es la tipica falta de meter a todo el mundo en el mismo saco.
Antes de internet, la gente retraida se metia en su cuarto a leer libros, escuchar musica, adorar a satan... esas cosillas. Ahora, comunicarse a traves de internet les da una seguridad que antes les faltaba, pudiendo ser lo que quieran ser, y ocultando todos sus complejos.
El autor del libro igual podria haber dicho que todo el que come en un mcDonalds esta gordo, y se habria quedado igual de agusto.
Internet ha supuesto una posibilidad de abrirse socialmente a gente que tiene problemas para hacerlo, y mantendre siempre que bien usado, puede ayudar a mucha gente.
Publicar un comentario